El caso Mahyuba ha precipitado agravios latentes
y recelos en ebullición entre sectores de la población saharaui de los
campamentos.
Los cerca de mil boihat que se han
manifestado en Rabuni para pedir explicaciones a la dirección del Polisario por
“la fuga” de Mahyuba llevaban décadas en silencio sintiéndose marginados y
subestimados. Este caso ha sido la gota que ha colmado la paciencia y la
tolerancia de esta tribu ante la incompetencia del Estado y la falta de una
legislación civil que regule este tipo de incidentes.
La situación ha sido grave. Sobre todo por la
dureza inadmisible de la actuación de la policía, ante una protesta pacífica
frente a la “Casa Amarilla”, en Rabuni. Violencia policial que se ha saldado
con la detención de una veintena de manifestantes, la mayoría siguen en prisión,
e hiriendo de gravedad a algunos de ellos. Una mujer ha perdido un ojo.
Afortunadamente parece que la situación se ha
logrado reconducir y los boihat han acabado constituyendo una “Célula de
Crisis”, que a partir de ahora les representa. El miedo a la reacción de la
tribu saharaui mayoritaria, que ha llegado incluso a plantearse la paralización
de la Administración de la RASD, ha obligado al presidente Abdelaziz a dar
explicaciones. Y ahora, que “hasta las cabras tienen móvil”, como dice el presidente, su discurso
ha llegado a las redes sociales.
Muchos que no conozcan las interioridades del
régimen y su peculiar política de comunicación, se habrán podido sorprender del
estilo “campechano” y hasta de la sinceridad del presidente, en muchas
expresiones tan poco políticamente correctas…. Otros pensarán que Abdelaziz con
sus explicaciones no está a la altura que cabría esperar de un Jefe de Estado… Incluso
hay quienes dudamos, que hoy, este tipo de discursos que me atrevería a
calificar de “paternalistas”, surtan el efecto deseado que tuvieron en el
pasado, especialmente entre la población mas joven.
Es bien conocida mi posición crítica con la
actual dirección del Polisario. Pero aún así, y a pesar de todo lo dicho, en
este caso, quisiera “romper una lanza” en favor del presidente Abdelaziz. En
primer lugar por haber reconocido que estas movilizaciones no han sido obra del
enemigo y que los que manifestantes eran saharauis mas patriotas que él. En
segundo lugar, al darse cuenta de la gravedad de la situación, por haber salido
a la palestra a dar unas explicaciones, que a pesar de su personal estilo, no
precisamente florentino, no están exentas de una relativa sinceridad, cierta
dosis de sentido común y hasta me atrevería a decir que levemente autocríticas,
y con una inusitada modestia, como
cuando se refiere al Polisario como una toalla… Y en tercer lugar, y quizás lo
mas importante, por haber reconocido e iniciado conversaciones con esta nueva
representación de los boihat, que a buen seguro será menos complaciente
que los tradicionales interlocutores.
Es muy probable que nada sea lo mismo a partir
de ahora, y que esta “Célula de Crisis”, a la que se han incorporado jóvenes
preparados junto a veteranos políticos
y militares, marque una serie de pautas políticas, que tendrán que ser
tenidas en cuenta.
Mientras, en la diáspora, en el cómodo refugio
de España, “los” y “las” oficialistas “a piñón fijo” con sus torpes y
simplistas comentarios, con sus clichés y tópicos, cuando no insultos,
arremetiendo en las redes sociales contra todos los que han defendido las
libertades y los Derechos Humanos han deteriorado gravemente y de forma un
tanto irreversible la imagen de la causa saharaui.
Lehdía Mohamed Dafa
12 noviembre 2014
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